Contando las palabras
Los labios del necio son causa de contienda; su boca incita a la riña. La boca del necio es su perdición; sus labios son para él una trampa mortal.
Proverbios 18:6-7 NVI
Hay un dicho muy popular que señala: "a palabras necias, oídos sordos". No debemos dejarnos influenciar por todo aquello que sea tóxico para nuestras vidas. De igual manera al hablar, no debemos apresurarnos, y procurar meditar en lo que decimos, recordemos que de la abundancia del corazón habla la boca, y reflejará todo lo que amamos, pensamos y queremos hacer.
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