DÉJATE
ENCONTRAR POR JESÚS
Mateo 14:34-36 NVI
Después de cruzar el
lago, desembarcaron en Genesaret. Los habitantes de aquel lugar reconocieron a
Jesús y divulgaron la noticia por todos los alrededores. Le llevaban todos los
enfermos, suplicándole que les permitiera tocar siquiera el borde de su manto,
y quienes lo tocaban quedaban sanos.
Así como dice esta parte
de la Biblia que Jesús visitaba lugares buscando sanar y restaurar, hoy en día
también lo hace, y aquellos que iban a su encuentro con fe eran bendecidos,
tanta era la fe que decían, "así sea un roce de su manto nos sanará”, y eran
sanados pero no porque el manto tuviera poderes mágicos, sino porque decidieron
creer en Jesús y creerle a Jesús ¿Quieres hoy recibir esa bendición?, ármate de fe y ve
al encuentro con Jesús porque ya él salió a tu encuentro.
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